martes, 7 de enero de 2014

Me quedo al margen

¿Por qué el mundo es así? ¿Por qué esta sociedad se comporta de esta manera? No saben valorar a las personas. La gente hace verdaderos esfuerzos para conseguir algo, y los demás no se dan cuenta, o no quieren darse cuenta. ¿Envidia? El deporte nacional. Todos van a conseguir la medalla de oro, y más de uno ya ha subido al podio y tiene colección de ellas. ¿Celos? Quién sabe. ¿Ganas de ver caer a otro? Por supuesto. Eso siempre. Y a mí me dan ganas de gritar: ¡Imbécil! cada vez que noto que alguien no me valora, que no se da cuenta de lo que me ha costado algo. ¡No necesito tu aprobación ni tus felicitaciones! cada vez que alguien intenta quedar bien y decir algo por decir, pero que no se fija en lo de verdad. Pero tampoco se puede ir así por la vida. Lo mío es lo mío, y no lo hago por nadie, ni para que me feliciten, ni para que me den su aprobación, ni para demostrar nada. Lo hago por y para mí. Cuando aprendáis a valorar a la gente, justo ahí, empezaré a creer en el mundo y su progreso. Mientras tanto, me quedo al margen.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Aquí puedes dejar tu aportación. Seguro que es maravillosa

/